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martes, 13 de marzo de 2012

Casino

¡Hola queridos visitantes de nuestro blog!
Hoy vengo a hablaros de una de las mejores novelas que he leído nunca; que además serviría luego de inspiración para mi película favorita.


Me refiero a la novela Casino, escrita por Nicholas Pileggi. Esta novela biográfica cuenta la vida de Frank Rosenthal, alias El Zurdo, un apostador de poca monta que subiría como la espuma en Las Vegas. Frank Rosenthal nación en Chicago en 1929 y no moriría hasta los noventa.
El Zurdo era un jugador obsesivo que no creía en la suerte. Al principio sus apuestas no eran importantes; solo apostaba al basket universitario; pero conforme fue ganando dinero fue subiendo de escalafón. Comenzó a trabajar para otros; montó su propia casa de apuestas y finalmente su máximo esplendor llegó cuando se coronó como director del famosísimo casino Stardust.

Frank vivió durante algunos años una época dorada; rodeado de lujo y confort; pero discusiones con su amigo de la infancia Tony Spilotro, con su mujer; chanchullos con la mafia y con algún policía corrupto, y problemas con el alcohol y las autoridades hicieron que Frank volviese a descender bruscamente, abandonando su vida en Las Vegas; no sin ello retirarse del todo del mundo de las apuestas deportivas.
El libro es totalmente verídico; y narra, además de la vida de El Zurdo, el ascenso del juego organizado en Las Vegas y nos explica bastante bien el funcionamiento interno de un casino.
El libro fue llevado al cine en 1995 de la mano del genial director Martin Scorsese. El filme, con guión original del propio Nicholas Pileggi, contaba con la actuación de Robert de Niro en el papel principal; Joe Pesci como Tony Spilotro y Sharon Stone como la mujer de El Zurdo. En la película, todos los nombres reales fueron cambiados; Frank Rosenthal se llama Sam Ace Rosthein y Tony Spilotro es Nicky Santoro.


La película, que sigue estrictamente las pautas marcadas por el libro, aunque dejando fuera una infinidad de detalles e historias secundarias, es una obra de arte de más de dos horas.
Pese a que el libro rebosa seriedad, la película le hace hueco a algunas escenas graciosas. Esta película, que quizá analizándola completamente no es totalmente fantástica, sí que deja para el recuerdo algunas escenas separadas. Por decir algunas, yo me quedaría con la primera; en la que Sam (Frank) se monta en su coche, arranca y el coche explota; o una en la que Sam arrastra a su mujer de los pelos por toda la casa…
También, por mencionar alguna anécdota graciosa nombraría la escena en la que Sam está en su casa jugando al golf y ve como aterriza una avioneta en el campo. Cuando les pregunta a los hombres que iban en la avioneta se entera que eran del FBI, y que llevaban tanto tiempo vigilándole que se les había acabado el combustible.

En definitiva; Casino como novela es bastante buena, muy pero que muy entretenida. Y Casino como película es una obra maestra; que mezcla amor y odio; honor y corrupción; casinos y asesinatos; todo esto con tres grandes interpretaciones bajo la mano de un genial director.
Yo, personalmente os recomiendo a todos tanto el libro como la película. Y aunque el libro es quizá un poco difícil que conseguir; si que os digo que con la película os lo pasaréis realmente bien; y que es una de esas que tienes que ver antes de morir.

¡Un saludo chavales!

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